La alegría es contagiosa, así que aléjate de la gente triste, negativa o violenta y mejor frecuenta personas sonrientes, positivas y satisfechas.
Sonreír genuinamente lo más frecuentemente posible
Una sonrisa genuina tiene efectos positivos en el cerebro, haciendo que tu actitud cambie por completo. Así que piensa en algo que te haga sonreír y ¡sonríe!
Ser flexible y adaptarse a los cambios o dificultades
El enojo, la frustración y la depresión son resultados de la inflexibilidad y poca capacidad de adaptación y aceptación al fracaso. Si quieres ser más feliz procura ser flexible y adaptarte a los cambios. Reconocer todos nuestros logros o las cosas que salen bien, aun siendo muy pequeñas o lo que podrías considerar insignificantes, nos permite regocijamos a lo largo del día y vivir con un sentimiento de logro continuo.
Apreciar placeres sencillos
Encontrar significado y agradecer por las pequeñas cosas que te brindan placer contribuye a un estado de alegría y bienestar general.
Perder la noción del tiempo
Cuando dedicas tiempo a una actividad que te apasiona y representa un reto para ti en el que involucras tus talentos , el tiempo se pasa sin que te des cuenta y contribuye a tu bienestar.
Alumnas del curso Nivel 1 de Piùbella Models en la clase de fotografía con el profesor Marius Uzoni expresando su alegría delante de la cámara.
